sábado, 5 de noviembre de 2011

Versos del Vacio - La ausencia en mí



Este es el vacío que inunda mi cuerpo.
Nadie tendrá de mí un buen recuerdo.
Sigo esperando a que muera la esperanza.
El absoluto de mi destino es una falsa alarma.



Los segundos de culpa ya no me protegen.
No hay palabras en esta memoria sin imágenes.
La lluvia sangra la maquina de los seres
que interrumpen el sueño de los cadáveres.



Desde ahora no me busquen mas.
Al menos que compartan mi odio.
Ya no tengo que despertar.
Ya no tengo que abrir mis ojos.



Años de invisibilidad me han hecho eterno,
y con una sola revelación puedo asustar al mundo.



Nos parten la gloria.
Me roban la tranquilidad.
Ya no me quedan las ganas de triunfar.
Apéname lo más que puedas.
Aterrizaste primero que yo.
Hoy quiero que mueras.
Es tarde para ser mejor.



El vuelo enmarca las delicadas líneas de la incredulidad.
Displicente es la providencia, por eso estoy aplastado.
Este niño lleva la impaciencia en el rasguño y en la palabra.
Felizmente me convierto en el afecto que te pudre.




El sol se ha levantado y resplandecen los muertos.
Esta es la forma en que dejo de avanzar y golpeo las paredes.
Esta es la forma en que se desafina mi alma y mi mente.
Soy de los tantos que han llegado acá sin alas.




Convocare las miserias de la ausencia,
para que así te des cuenta,
que no hay nada que se asemeja
a las extrañas fuerzas que me tientan
a destronar todo lo que me llena.



Preocuparme no es mi gran pasión.
Me recreo sobre las cenizas.
Bienvenidos al cielo de la droga y el alcohol.
Por cada día feliz se me acumulan las desdichas.




A cada momento espero ansioso 
cuando al fin pueda caerme del tiempo,
y deje de ser un desfigurado en esta eternidad negativa.



No me des fuerza, dame cobardía.
No me des talento, dame ineptitud.
No me des el placer, dame la agonía.
No me des afecto, dame ingratitud.



Creo que me cuidan para que mi vacío siga intacto.




No hay comentarios:

Publicar un comentario