Quizás ya no logre levantarme mañana.
Quizás deje de ver a todos mis amigos.
Quizás nunca saldré al mundo.
Quizás comenzare a esconderme.
Quizás no he amado ni amaré.
Quizás no quiera conocerte.
Quizás no quieras volverme a ver.
Quizás me he reído demasiado.
Quizás alguien me ha extrañado.
Quizás no he hecho lo suficiente.
Quizás quiero enfermarme.
Quizás quiero que me comprendas, quizás no.
Quizás quiero que me conozcas, quizás no.
Quizás haya nada para mi.
Quizás la mierda me caiga encima.
Quizás no deba hablar.
Quizás no deba cantar.
Quizás deba alejarme
Quizás he dejado de pensar.
Quizás deseo.
Quizás no puedo.
Quizás mañana no me veré como me veo hoy.
Ha continuado la revancha de las ilusiones, y esto me permitirá criar lagrimas y luces de amanecer si mis manos arranca del amor la sinceridad del miedo.
Mi mariposa espectral
no ha llegado a esta flor marginal
ni a estas flores putrefactas.
Creo que dejo su legado
con las lagartijas que siempre descansan,
o de pronto con otro animal
que tenga muchos colores,
que nade o sepa volar.
Mi mariposa espectral no ha llegado,
tal vez porqué no lanzo llamas por la boca,
tal vez porqué al cabalgar no levito.
Creo que está en un sitio perdido,
donde vibra al ver su propio ser,
donde rasga el aire de los sentidos,
donde busca sus nuevas alas,
donde caga su propia piel.
Ángel del recuerdo pronto será tu venganza.
Astillaras mis pensamientos para excitar tu arrogancia.
Se misericordioso conmigo, adviértele a estos testigos
la forma en que destruirás con palabras mi destino.
Haz abierto espacio para tu desprecio,
y haz dejado sin aire al amor.
y haz dejado sin aire al amor.
Somos desechables para ti, si no te damos el cielo.
Somos desechables para ti,
si nuestra belleza no es como el de una flor.
si nuestra belleza no es como el de una flor.
Me vendieron a una mujer hermosa que me enseño a cabalgar cometas, a flotar en belleza y a atravesar mundos con mi sombra. Me llevo a lugares oscuros donde compartía su sangre; le mentía a los ángeles guardianes y se reía de los animales quiméricos. Me mostró su sonrisa al hipnotizar suicidas. Vi su encanto perjudicar a los santos mientras yo estaba detrás de ella vomitando sobre sus estelas. Me hizo sentir el movimiento del universo. Al final del día la hice desaparecer porque llenó mi piel con sus ojos perversos y no soporte la nausea por tanta profanidad.
Drunk:
Caras empolvadas de arsénico. Sonrisas de goma.
Caras empolvadas de arsénico. Sonrisas de goma.
Televisores derretidos por falta de atención.
Detrás de los ojos todos hablan de todos.
Sus miserias han sido conquistadas por mis deseos.
Veo águilas ensangrentadas sepultadas en tus oídos.
Veo águilas ensangrentadas sepultadas en tus oídos.
No pidas ayuda a la locura que murió con tus amores.
Canto algunas veces para saber si alguien muere.
Brilla y salta con atención, la inercia mostrara su pasión.
Ha continuado la revancha de las ilusiones, y esto me permitirá criar lagrimas y luces de amanecer si mis manos arranca del amor la sinceridad del miedo.
Me dirijo al camino donde solo existe el bien,
y aunque deje de ser un asesino se que no olvidare...
de los que he conocido, de los que mate,
de aquellos culpables que no les perdoné
sus miserables vidas que con gusto sepulte.
En mis sueños se encuentran todo lo que ya logre,
victimas, drogas y sexo; música y cine también.
La noche me ha hallado
con toda la exquisitez de mis fantasías.
con toda la exquisitez de mis fantasías.
Ellas arrebatan la inocencia de los hijos que ven
toda esa apariencia que muestran en la TV,
ahí esta la esencia de lo que estuvo y se nos fue.
Yo soy la bestia que reencarnara en tu bebe.
He visto sus ojos maldiciendo la felicidad, hablándome pausadamente y en silencio también. A veces te abrazo para saber si no estoy dentro de un televisor, o en letras discípulas de tu sucia imaginación.
Te prefiero cuando saltas febrilmente, cuando gritas tus sueños sin piedad, cuando adivino tus angustias, cuando calla tu cuerpo, cuando escupes la lealtad de las maravillas.
Me gusta detallar cada imperfección tuya para saber que tanto te debo amar, para saber que tanto debo mostrar, no sin decirte que eres lo quiero ahora y quizás después.
Ciertas luces se encienden cuando se sufre.
Estaba proporcionada con sus dotes escandalosos; armando árboles de hierro, ordenando al crepúsculo a extinguirse, anónimamente persiguiendo la traición. Su nombre no existía y nadie le perdono eso.
La vi alguna vez rondando por los parques de cristal, lamiendo los algodones que se hallaban en los escombros, a veces, viraba entre los humos deteriorados que rondaban las luces de los faroles. Cada parte de ella estaba en las cosas que deseábamos, pero su corazón había cambiado y ella no sabia porque. Ahora parece la exaltación de una misericordia decaída, y su gen vive como una especie de bacteria alcohólica que se retuerce en la brisa.
Solo piensas en llorar, en mandarles recados al diablo, en andar volando por esos sitios peligrosos, en bailar delante del mundo de forma arrebatada y suicida. Solo piensas en andar pisoteando a esos monstruos que vomitan la vida, y en estar huyendo del agua bendita que lloran los santos y las vírgenes. Solo piensas en matar a tus amigos mientras te diviertes torturando a perros sarnosos que descuidaron el amor de las calles. Solo piensas en darme besitos y sexo oral para disculpar tu crueldad y para dejarte ir lejos con los muertos y los duendes que comunican los mandatos de tu reino.